Análisis de Blazing Strike, un juego de lucha sencillo y divertido

En la última década, la popularidad de los juegos de lucha ha ido en constante ascenso, una gran suerte para los que disfrutamos de este género. Las franquicias clásicas que conocíamos han evolucionado para acercarse al público casual, haciendo que estos juegos se vuelvan cada vez más espectaculares, cinematográficos y ambiciosos.

Por otro lado, en la industria independiente, muchos títulos buscan acercarse a los grandes éxitos de los arcades clásicos, y Blazing Strike no es la excepción. Este juego de lucha en 2D, desarrollado por RareBreed, intenta emular a clásicos de las salas de arcade japonesas, como Street Fighter III: 3rd Strike de Capcom y The King of Fighters ’98 de SNK, a veces, quizás, tomando demasiada inspiración de ellos.

Como se puede apreciar en imágenes y avances, este título de lucha destaca especialmente en su colorido estilo de pixel art, que evoca aquellas tardes después de la escuela, jugando King of Fighters con amigos en la PlayStation 2.

El juego nos presenta la historia de un mundo postapocalíptico, donde un gobierno corrupto gobierna con mano de hierro mientras un grupo de disidentes se alza en nombre del pueblo. Aunque no es una trama novedosa, la narrativa se enriquece gracias a su estilo de cómic colorido y personajes llenos de vida (aunque con personalidades algo cliché), lo que la hace amena e interesante de jugar. Este enfoque es poco común en muchos juegos de lucha modernos, donde quienes disfrutamos de este género solemos ir directamente al “modo de entrenamiento” o a las partidas en línea.

Hablando del modo de entrenamiento, me parece, demasiado «retro». Hoy en día, estamos acostumbrados a que los modos de entrenamiento en los juegos de lucha sean auténticos laboratorios de científico loco, con decenas, si no cientos, de opciones. En comparación, el modo de entrenamiento de Blazing Strike se siente excesivamente arcaico frente a casi cualquier otro juego del mercado.

Esto contrasta con las mecánicas y el gameplay, donde el equipo de RareBreed ha optado por un estilo más moderno. Han simplificado los inputs y añadido una barra de resistencia similar a la de Street Fighter. En cuanto a los inputs, han decidido dejar solo los cuartos de círculo y las medias lunas para las habilidades, lo cual resulta un poco extraño en ciertos personajes, como Alexander, el grappler del juego.

La barra de resistencia, por otro lado, es una mecánica que considero muy interesante, ya que permite ejercer una gran presión en combate, pero exige una buena gestión de los recursos. Además, algunos personajes, como Pink, que utiliza una espada motorizada, tienen recursos adicionales que gestionar al usarlos. Esto añade profundidad a su estilo de juego, aunque es una pena que solo se aproveche en este personaje, ya que podría haber aportado mayor variedad al gameplay en general.

Donde realmente brilla este juego es en las partidas casuales con amigos. Con un elenco de personajes reducido y mecánicas relativamente sencillas de dominar, Blazing Strike es ideal para jugar en reuniones con amigos o para pasar una tarde en solitario compitiendo en rankeds, gracias a su sistema de rollback, una característica imprescindible en cualquier juego de lucha que se precie.

En España, Blazing Strike está disponible en dos ediciones físicas para PlayStation 5 y Nintendo Switch, distribuidas por Meridiem. Puede encontrarse en tiendas como Amazon, con un precio recomendado de 39,99€, y en otras como Wakkap, donde también está disponible en formato físico a un precio ligeramente reducido de 34,90€.

Además, Blazing Strike llega también a España con una Limited Edition, que incluye el juego en formato físico y algunos extras, como un libro de arte, 14 cartas coleccionables de los personaje y la banda sonora original del videojuego, todo ello en formato físico.