Llevo una semana escribiendo y borrando este mismo artículo, una y otra vez. Quería haber hecho un análisis profundo de los equipos, algo más técnico o incluso algo didáctico. Pero no creo que a día de hoy sea quién para analizar o enseñar a alguien sobre VGC, y menos al público más docto. Por eso pensé que la mejor forma de expresarme sería dando la crónica del mundial, desde mi punto de vista, de una forma crítica y sin tapujos.
El stream fue malo, es más, decir malo es poco, pero si fue un avance… Si volvemos a años anteriores nos podemos dar cuenta de que, realmente, TPCi ha avanzado mucho. Hay más y mejor cobertura que antaño, pero sigue siendo insuficiente. La falta de capacidad para stremear más partidos simultáneos, las rondas que se jugaron fuera de cámara y las caídas durante el segundo día de competición, fueron simplemente terribles para el espectador.
Cuando yo veo una competición de deporte electrónicos busco la acción constante, rotando rápidamente entre: entrevistas, combates y análisis del mismo, cosa que en este caso no se cumplió. No vi la publicidad del competitivo que buscaba, ese impulso que estaba esperando y nunca llegó… Pero sin duda lo que más me decepcionó fue saber sobre la cantidad de gente que veía la competición y no le importaba un pimiento VGC, simplemente le importaba estar atenta por si salía algo nuevo de Pokémon Sol y Luna. De hecho me tomé como justicia poética que no pusieran nada nuevo el día de clausura.
En cuanto a la competición en sí, yo creo que fue lo que salvó el espectáculo. El nivel fue mucho mayor de lo que yo me esperaba, y pese a que no ganó ningún español, pudimos ver levantar la copa a Wolfe Glick. El jugador al que, según toda la comunidad, o casi toda, Pokémon le debía un mundial. No llevó un equipo del estilo de Xerneas/Groudon. Llevó un Rayquaza/Kyogre, aderezado con toques de genenialidad que le otorgaban el Hitmontop con botón escape, o el raichu con chaleco asalto. Por no mencionar ese M-Gengar, como opción de megaevolución, junto con el Rayquaza.
«Me decepcionó que mucha gente viera los mundiales solo por posibles noticias de Sol y Luna, mucha gente no estaba interesada en el VGC».
En fin, como dije antes no quiero profundizar mucho en datos técnicos, porque no soy, ni mucho menos el indicado para hacerlo.
En cuanto a los jugadores españoles he de confesar que yo lo pasé muy mal. Es la primera vez que personas a las que considero amigos y se han portado mejor conmigo que nadie en mucho tiempo, no poder llegar a su objetivo. Yo el sábado me fui a dormir prácticamente llorando de pena, igual que me pasaba cuando eliminaban a España en el fútbol o en cualquier deporte tradicional. Con esa pena se mezclaba rabia, porque si no somos un esport ¿Por qué narices me importa tanto? ¿Por qué narices ver perder a los jugadores españoles me hace sentir como si perdiese yo?
También he aprendido que la comunidad de Pokémon es muy clasista y en una comunidad generalista al que le gusta VGC, no puede evitar sentirse solo. En este caso en mi comunidad, era el único emocionado por el mundial, el único al que le dolían las victorias y derrotas, de hecho, pese a ser comunidad del mismo juego me sentí profundamente alienado…
Para concluir me gustaría dedicarle unas palabras a los jugadores que nos representaron en el mundial, a todos ellos, sin excepción, pero especialmente a aquellos con los que he tenido más trato.
Y es que yo sé que me creé muchas expectativas porque la temporada regular de España, en Europa fue digna de mención, también sé que el mundial es lo más difícil, y por eso mi tristeza no va en cuanto a vuestra participación en el mundial. Mi tristeza va dirigida a no veros cumplir vuestros objetivos, porque sé lo mucho que cuesta llegar allí. Habéis viajado por vosotros, por vuestros propios objetivos y metas, pero indirectamente habéis viajado por toda Europa y hasta América, para representar a los que no tenemos vuestra habilidad, o para representar a vuestros compañeros que no se pudieron permitir el viaje. Al final es una pena ver tantos objetivos truncados y tantos viajes de 8, que fácilmente pudieron ser de 10, pero bueno. Pokémon crece, crece a cada año y con él, crece VGC.
Es posible que no viváis los frutos de vuestro esfuerzo, pero cada año hay más facilidades, más viajes y más oportunidades. Gracias por dar todo vuestro esfuerzo y os esperamos volver a ver el año que viene, junto a más representantes en Anaheim.
