Análisis de The Zebra-Man, un juego muy bizarro

Hoy os traemos un análisis en profundidad de los aspectos más importantes de The Zebra-Man, un juego independiente que fue lanzado el 30 de enero de 2025 para Steam, pero nos centraremos en su versión para Nintendo Switch. Este videojuego desarrollado por Thunder Zebra y Zerouno Games pertenece al género de aventura y exploración. Por razones personales, el protagonista decide convertirse en guardabosque y empiezan a suceder situaciones extrañas en su guardia.

Historia y contexto

La historia en The Zebra-Man va más allá del videojuego. Thunder Zebra, el creador de la idea original, tiene a sus espaldas varios cortos y largometrajes alrededor del universo Thunder Zebra que podéis ver en su canal de Youtube. No solo vamos a encontrar referencias a sus personajes antes de aparecer en el videojuego, si no que The Zebra-Man aporta continuidad a su universo.

El primer personaje es un hombre corpulento al que arrastran al interior de una prisión, pero rápidamente recibimos ayuda del exterior de alguien que quiere ayudarnos a salir. Obviamente, con toda clase de violencia y sangre. En paralelo, Alexander es un niño muy especial que lo hace todo bien que contrasta la postura del personaje desconocido. Por último, en el mismo barrio se juntan un cura de moral cuestionable y unos policías que esconden los trapos sucios.

Todo esto mezclado en pocos capítulos crean una obra jugable y visual, pues se van añadiendo fragmentos de grabaciones reales de lo que está ocurriendo.

Jugabilidad

The Zebra-Man es un juego de acción en vista cenital, por lo que en todo momento vemos el mapa desde arriba. En cuanto a mecánicas, realmente son muy sencillas, ya que solo podemos movernos, atacar y ponernos en modo diablo.

Cada nivel cuenta con sus particularidades. En concreto, los del hombre musculo con la máscara de cebra consisten en salir de la prisión y ayudar a otro personaje, a poder ser eliminando a todos los que nos intentan impedir la huida. En cambio, con el resto de personajes son acciones más relajadas, como regar las plantas, repartir periódicos o recabar pruebas en la escena de un crimen.

The Zebra-Man cuenta con sus puños y alguna arma para superar los niveles. Aunque no es un juego largo, un paso en falso y estamos acabados. Los enemigos siempre tienen ventaja sobre nosotros, ya sea porque tienen armas a distancia o porque nos cogen desprevenidos. La estrategia es crucial para avanzar además de unos buenos reflejos para esquivar balar y reaccionar a pequeñas oleadas de enemigos.

Destacar que, aunque son pocos niveles, todos ellos cuentan con un pequeño logro por realizar todo lo que nos piden, como repartir todos los periódicos. Al final de todo el juego, nos hacen un resumen de lo que hemos completado y lo que no, además de incitarnos a volver a jugar para desbloquear escenas inéditas.

Por último, The Zebra-Man también esconde objetos secretos por todos sus niveles, que no serán nada fáciles de encontrar. Pensar «out of the box» parece ser la filosofía para encontrarlos.

Apartado audiovisual

The Zebra-Man es un juego en pixelart y cuya paleta de colores es principalmente el blanco y negro. La sangre es roja y puntualmente se usan el amarillo y el azul para resaltar otros objetos.

Respecto a la música, tenemos de todos los estilos. Reggaeton, rock, clásica… Cada una tiene su prpia función dentro de la escena. Por ejemplo, la clásica parece dar el punto de ironía y de nerd con el personaje al estilo Sheldon Cooper mientras que el tema principal de The Zebra-Man rockero se usa para motivar al jugador.

Impresiones

En esta sección del análisis de The Zebra-Man he recogido todos las impresiones y sensaciones que he sentido mientras jugaba, todo desde mi punto de vista.

En primer lugar, este juego es una ida de olla muy fuerte. Puede parecer un Hotline Miami, pero rápidamente toma distancia e incorpora eventos como minijuegos, sustos o escenas «sin sentido» dentro del juego. Además, las pantallas de carga tienen frases de lo más… Curiosas. Desde un consejo como que no se puede saltar en un juego (obvio, ¿no?, hasta letras de canciones de Bad Bunny).

A parte de utilizar lenguaje ofensivo y malsonante, las situaciones que se dan tampoco son para menos. The Zebra-Man se sitúa después de la muerte del dictador español, por lo que ciertas figuras como la de la iglesia y la policial se utilizan para darle un humor muy oscuro al juego.

Respecto a los secretos y referencias, está completamente lleno. Encontramos los habituales de la marca España, pero también referentes del propio Thunder Zebra, como No More Heroes. Pequeños guiños que demuestran que The Zebra-Man es un juego de autor y que lo hacen como quieren.

Por último, constantemente están rompiendo la pared. Realmente no sabes si estás jugando o viendo un corto. Es como si el The Zebra-Man jugara con el jugador, haciéndole partícipe de la historia todo lo que puede, aunque sea un disparate.

Conclusiones del análisis de The Zebra- Man

Llegamos a la última parte de este análisis de The Zebra-Man. En pocas palabras, se trata de un juego que busca ampliar el universo de su creador, además de traer una experiencia divertida a sus jugadores.

La duración de The Zebra-Man es corta, de apenas una hora si somos realmente buenos y no cometemos errores. Si buscamos ompletar todos los logros y encontrar los coleccionables la duración se amplia, pues no hay selector de nivel y siempre tocará empezar de nuevo.

Después de realizar este análisis, The Zebra-Man es un juego que tiene muy clara su inspiración, pero que no busca ser una copia con un estilo distinto. Combinar un videojuego con cortos no es habitual, pero aquí enriquecen la experiencia y la vives completamente. The Zebra-Man se puede adquirir en Nintendo Switch por 14,99€.