Es importante tener en cuenta que Farlands ha llegado en un acceso anticipado muy temprano y de forma exclusiva para la plataforma de Steam. Más adelante, tras su lanzamiento completo, el juego se encuentra planeado para llegar a más plataformas, entre ellas Nintendo Switch, donde una buena parte de nosotros lo esperamos y donde seguramente será un auténtico éxito, ya que este tipo de juegos son prácticamente un éxito asegurado en la consola portátil de Nintendo.
Actualmente, según las sensaciones que transmite, podría decirse que el juego tiene creada la base de lo que está por venir. Sin embargo, al estar en pleno desarrollo, lo que daré a continuación no es una opinión final, sería algo injusto. Por lo tanto, me limitaré a ofrecer mis primeras impresiones durante las primeras horas de juego (un par de estaciones completas).
Por otra parte, también debo añadir que Jandusoft junto a L&V Media están realizando un buen trabajo, ya que el juego está recibiendo un ritmo de actualizaciones increíble para solventar todos los problemas que impiden disfrutar de la experiencia o seguir progresando en la misma. Esto demuestra que están comprometidos con su proyecto a pesar del arriesgado lanzamiento tan temprano y que no todo quedará en un proyecto abandonado o medio acabar.
Lo bueno de vivir en el espacio
Farlands comienza con una breve cinemática en la que podemos ver cómo obtenemos un planeta y una nave espacial a un precio ridículo, todo esto debido a que es una zona abandonada y en muy malas condiciones. Tras llegar, se nos presentará la zona junto a la persona que nos ha timado, y dará comienzo el juego de granjas. Nuestro objetivo será restaurar esta granja para que vuelva a producir como lo hizo en algún momento del pasado.
Lo primero que se nos propone es una especie de mini tutorial, en el que se nos enseña lo más básico y se nos anima a explorar las zonas según vamos avanzando. En general, contamos con lo típico de estos juegos: nuestra granja, una aldea, una mina y zonas diversas como bosques o pasajes rocosos. Sin embargo, la peculiaridad de Farlands es que todas estas ubicaciones se encuentran en diferentes planetas, lo que nos obligará a hacer un uso constante de nuestra vieja nave para desplazarnos entre ellos. Esto requiere el uso de un combustible que creamos nosotros mismos y afecta a los horarios del juego, debido al tiempo de desplazamiento entre planetas.
En la gran mayoría de estos videojuegos de granjas, como es el caso de Stardew Valley (un juego en el que de forma inevitable pensamos y comparamos debido su gran popularidad e influencia), los días normalmente se planifican para realizar una tarea específica. Por ejemplo, un día podemos decidir dedicarlo a la mina, desplazándonos hasta allí y dedicando la mayor parte de las horas del día a esa tarea. En el caso de Farlands, esto es algo distinto, ya que al desplazarnos con una nave podemos planificar nuestros días o semanas. Podemos dormir en la nave, lo que nos permite recuperar la mitad de nuestra energía, pero también nos da la posibilidad de pasar, por ejemplo, una semana completa minando para alcanzar nuestro objetivo y, en parte, ahorrarnos una parte del camino.
Algo que me ha gustado es este sistema de planetas; es algo que puede ofrecer una gran diversidad de biomas y zonas distintas para explorar, además da lugar a expansiones o planetas secretos de cara al futuro. Si más adelante se implementa la posibilidad de tener múltiples granjas, podría ser muy interesante que cada una funcione con un clima diferente, permitiendo cultivar semillas que normalmente no crecerían en tu planeta o alguna variante de semilla que necesite unas características concretas.
En cuanto a historia en Farlands, esta parece consistir en que nuestro sistema planetario atraviesa uno de sus peores momentos. Muchas especies inteligentes lo han abandonado para vivir en lugares mejores, y además, una malvada empresa parece querer aprovechar esta decadencia debido a la abundancia de minerales en los planetas. Sin embargo, nuestro alcalde desea inscribir el sistema en un programa de protección, y para ser aceptados, deberemos recolectar todo tipo de peces, minerales, objetos, insectos y más, para que esta asociación decida proteger toda la zona y salvarnos durante unos cuantos miles de años.
El estilo visual pixelado es muy vistoso y animado; fue una de las primeras cosas que más me llamó la atención. Generalmente, los escenarios, herramientas y personajes se ven bien. Sin embargo, espero que el apartado visual no se quede estancado en lo que ofrece actualmente y continúe evolucionando junto con el resto del juego, ya que en algunas áreas necesita mejoras. Por ejemplo, algunos personajes, como Siona o el vendedor, se ven extraños, siendo el primero una especie de gato con peluca y el segundo un tipo cualquiera. Además, algunos objetos y escenarios parecen tener un tipo de sombreado y delineado, pero en otras zonas, objetos similares cambian por completo su estilo de dibujo o directamente pierden el sombreado.
Lo malo de vivir en el espacio
Por otra parte, el sistema de estaciones no termina de parecerme muy lógico y resulta confuso al principio. En Farlands existen las estaciones de primavera, verano, otoño e invierno. Nosotros comenzamos, como es típico, en la estación de primavera, que se indica en el menú superior con una flor. Sin embargo, al comprar semillas, encontramos que algunas se refieren a climas templados y cálidos, mientras que otras mencionan directamente estaciones como el otoño. Esto me ha dejado algo perdido, ya que no entendía si mi granja tiene distintos climas o si esto es una idea para el futuro de cara a contar con más granjas. Además, me resulta extraño que se hable de climas y luego se mencionen directamente las estaciones.
Otra parte extraña del sistema de estaciones es que, al avanzar en el juego, las estaciones cambian solo en nuestro planeta, mientras que el resto de los planetas permanecen con el mismo clima durante todo el año, ya sea cálido o templado. Esto me hace pensar que quizás este sistema aún no está completo y que, en el futuro, todos los planetas cambiarán con las estaciones o tendrán sus propias estaciones de manera independiente, según el momento del juego en el que nos encontremos.
La interfaz de Farlands es un apartado que no ha terminado de convencerme. La barra de herramientas y otros elementos tienen un tono verdoso que parece simular una pantalla o holograma combinado con partes metálicas, mientras que el calendario y las estaciones se presentan como una máquina oxidada y antigua. Esta falta de coherencia en el diseño de la información superior resulta en una apariencia poco atractiva, sintiéndose incluso recargada y amontonada en una esquina. En general, toda esa sección de información se siente extraña.
Junto a la interfaz, las cajas diálogo también me parecen extrañas. Entiendo que tienen un recuadro para mostrar nombres más largos, pero en nombres cortos queda raro, dando la impresión de que no está bien centrado o está descolocado. Además, la fuente se siente extraña, como si no fuera realmente pixelada y se situara en un punto intermedio. Los colores tampoco terminan de convencerme, ya que resultan poco atractivos. Además, la combinación de colores en la sección de opciones de diálogo dificulta un poco la legibilidad.
Mucha esperanza en este sistema planetario
A pesar de estar en una versión alpha, con acceso anticipado y con muchas de sus mecánicas importantes aún sin implementar (están todas planeadas en un calendario), me lo he pasado muy bien jugándolo, y eso dice mucho. Que un juego en su estado más básico logre mantenerte entretenido durante horas, a pesar de sus fallos y falta de contenido, da bastante esperanza, aunque tras jugar unas horas vuelves a la realidad y llega la peor parte, sobrellevar una larga espera, con muchas ganas de comenzar a jugar la versión completa. Por mi parte, me queda esperar y ver cómo se actualiza progresivamente añadiendo nuevos sistemas que lo vuelvan más complejo y divertido. Por otra parte, lo positivo de todo esto es que la comunidad podrá influir en gran medida para moldear una versión final más adaptada a todos.
Más adelante, Farlands nos ofrecerá todo lo que podemos esperar en juegos de granjas, romance con aldeanos, bodas, eventos, decoración de nuestra casa (y espero que también de nuestra nave espacial), más objetos para decorar el exterior y una mina más completa que explorar. Por el momento, podemos entretenernos disfrutando unas pocas horas de un videojuego de granjas que promete. Personalmente os diría que si decidís adquirirlo podéis tomarlo como un gesto para apoyar el proyecto por su buen trabajo. Podéis encontrarlo en Steam a partir de esta misma tarde. Gracias a Jandusoft por permitirnos probarlo de forma anticipada.