Hoy os traemos un análisis en profundidad de los aspectos más importantes de Knight vs Giant: The Broken Excalibur, un juego independiente que fue lanzado el pasado 5 de octubre para Nintendo Switch, PS5, XBOX y PC. Este videojuego desarrollado por Gambir Studio, un estudio indonesio, pertenece al género Roguelite de acción y fantasía. Jugaremos como el rey Arturo Pendragon que utilizará su espada Excalibur rota para canalizar los poderes de los caballeros de la Mesa Redonda. Deberemos derrotar hordas de enemigos al estilo Hades para seguir avanzando en nuestra cruzada para salvar a nuestro pueblo.
Contexto e historia
El rey Arturo Pendragon y sus fieles caballeros de la Mesa Redonda se encontraban en una misión con el objetivo de recuperar el Santo Grial para el famoso mago Merlín cuando ocurre un suceso inesperado: liberan al Gigante del Vacío. Arturo decide entablar una batalla contra el gigante cuyas posibilidades de ganar son nulas. Su espada Excalibur termina por romperse y él y sus caballeros terminan muertos. Tras esto, Merlín decide lanzar un conjuro para devolver al gigante a la dimensión a la que pertenece. El conjuro no sale como esperaba y arrastrando también a todo el reino de Camelot. Al final, con el poder para revivir a un solo caballero, Merlín decide revivir a Arturo. El objetivo de su nueva misión será derrotar a las 3 almas del gigante del vacío y encontrar a todos los habitantes de Camelot, que han quedado desperdigados por todas las mazmorras.
Jugabilidad
Cuando el mago Merlín nos ponga al día de todo lo que ha pasado, nos explicará como debemos aprovechar el poder de nuestros caballeros a través de la espada. En Camelot disponemos de una estatua por cada uno de nuestros caballeros, los cuales tienen un ataque básico y una habilidad que los hace únicos. Al inicio del juego tendremos disponibles 2 ellos, hasta un máximo de 7 caballeros. Podremos combinar cualquier ataque básico con cualquier habilidad, por lo que deberás encontrar la combinación que más se ajuste a tu estilo de juego.
Tras escoger rápidamente nuestra combinación (2 posibles al inicio), nos lanzaremos a la primera mazmorra. Vamos a llamar mazmorra al recorrido desde el momento en el que iniciamos en la primera sala hasta derrotar al jefe o minijefe en la última sala. Cada mazmorra cuenta con salas repletas de monstruos, que irán aumentando en cantidad y dificultad en base al avance en cada mazmorra. La recompensa por limpiar una sala puede ir desde monedas para comprar edificios o mejoras para Camelot, almas para comprar objetos temporales que nos beneficien durante cada mazmorra, mejoras para nuestro ataque básico o habilidad o una mejora para nuestro caballero.
Además de las salas de monstruos, contaremos en cada mazmorra con una sala de mercader donde invertir las almas y un santuario para recuperar toda nuestra salud de un único uso. En el primer bioma en el que empecemos nos podremos encontrar también a Morgana, que nos bendecirá con una ventaja y desventaja y una sala de reto.
Contaremos con 3 biomas: el bosque, el desierto y el volcán. Cada uno de estos biomas tiene sus propios monstruos, minijefes y jefe.
Apartado audiovisual
Knight vs Giant está ambientado en la época medieval, por lo que la música tiene ese toque de fantasía para hacer las batallas y mapas más épicos. Por otro lado, el apartado visual está cuidado al máximo: cada mazmorra tiene sus propios detalles únicos además de los monstruos. Aunque hayamos terminado de limpiar una sala, para nada se siente vacía, aunque si un poco solitaria. Así, en la zona del bosque contaremos con hierba, flores, troncos caídos o caminos de piedra, mientras que en el desierto tendremos ruinas, vasijas y otros elementos que dan ese toque de personalidad al entorno.
Impresiones
En esta sección del análisis de Knight vs Giant he recogido todos las impresiones y sensaciones que he sentido mientras jugaba, todo desde mi punto de vista.
Durante el tiempo que estuve jugando para realizar el análisis de Knight vs Giant, el juego recibió una actualización, por lo que habrá cosas que posiblemente ya estén corregidas en el momento en el que leías esta entrada.
En primer lugar, vamos a comentar el apartado de obtener nuevos caballeros para cambiar nuestro ataque básico y habilidades. Tras aproximadamente 15 horas de juego pudimos desbloquear al primer caballero nuevo. Esto quedó resuelto con la actualización de mediados de octubre y en principio, ahora se debería conseguir mucho antes. Esta progresión tan lenta a la hora de conseguir nuevos estilos de juego hace inviable querer cambiarlos a mitad de partida. Me explico: uno de los habitantes de Camelot nos permite mejorar las características de los caballeros, por lo que tras tantas horas de juego, hemos mejorado lo suficiente los primeros 2 caballeros como para que sean viables para terminar la historia. Con la modificación de conseguir caballeros más pronto quizá esto haya cambiado.
Después de que el mago Merlín nos reviva, el reino de Camelot está en ruinas y solitario. Durante nuestras rondas, podremos encontrarnos con los habitantes. Cada uno de estos habitantes tiene su propia historia o tienda en el reino, por lo que reclutarlos a todos al final nos beneficiará para la siguiente ronda. Sin embargo, solo podremos encontrarnos con un habitante en el mejor de los casos, y algunos de ellos solo nos cuentan un par de frases.
Sobre los biomas, minijefes, jefes y recompensas. Solo existen 3 biomas, que se completan en el mismo orden durante todas nuestras rondas a excepción de una condición aleatoria que nos puede ofrecer una habitante de Camelot en la cual este orden se vuelve aleatorio. Una ronda puede durar alrededor de 40 minutos o más, según lo rápido que limpiemos las salas o derrotemos a cada jefe. Las rondas constan de 2 mazmorras de cada bioma: en la primera mazmorra de cada bioma nos enfrentaremos a un minijefe de dos posibles y en la segunda mazmorra, al jefe, que siempre será el mismo. Cada vez que completemos un jefe obtendremos un cristal, hasta un máximo de 3 por ronda. En la última actualización el mercader de cada mazmorra puede llegar a vendernos un cristal. En mi caso, no he llegado a ver esa opción.
Por otra parte, los patrones de los minijefes y jefes no cambian en ningún momento. Por tanto, lo que empieza siendo un reto, termina siendo un mero trámite repetitivo y aburrido sin nada nuevo. El objetivo tras completar la primera ronda hasta el final, es repetir 9 veces el mismo recorrido, que lleva alrededor de 40 minutos y que en algunas ocasiones, no podremos llegar a completar porque nos derrotan antes. Tras la actualización de mediados de agosto, el jefe de la mazmorra de fuego si ha recibido cambios en su patrón de ataque y diría que es incluso más difícil que el siguiente jefe. Se vuelve en algunos puntos injusto y apenas hay oportunidad de atacar a no ser que dispongamos de alguna mejora defensiva.
Comentar brevemente que el sistema de mejora de los caballeros consiste en ir al herrero e invertir una serie de monedas en los caballeros, que necesitan ser usados en las rondas para obtener experiencia. No es un sistema del todo aburrido pero si que te incita a no variar la combinación que lleves. Al tardar tanto en obtener el tercer caballero, las mejoras del primero y del segundo periten avanzar mucho más lejos y rápido en las mazmorras. Conseguir un caballero nuevo y querer jugar con él parece estar más pensado para un post-game y no para encontrar tu propio estilo. Quizá un sistema de mejora por nivel en lugar de personaje tenga más sentido. De este modo, conseguir un nuevo caballero no sería dar un paso atrás en el avance de la historia.
Para finalizar, el juego ofrece la posibilidad de que cada ronda sea «única». Tras limpiar cada sala, existe la posibilidad de obtener una mejora para nuestro ataque básico, habilidad o mejoras más generales. Más daño, más probabilidad de crítico, barreras defensivas o poder aplicar veneno con nuestros ataques son algunos ejemplos. Aunque al inicio puedan parecer bastantes, tras un par de mazmorras se repiten bastante.
En el caso del mercader y otros personajes que ofrecen mejoras temporales, terminan por ser siempre las mismas. Al final buscas la combinación ganadora para asegurarte esos 40 minutos de ronda sean bien empleados.
Conclusiones
Llegamos a la última parte de este análisis de Knight vs Giant: The Broken Excalibur. En resumen, la idea de este videojuego roguelite está bien, sin más, pero terriblemente ejecutada.
Normalmente, las dudas que me surgen mientras juego tienen más relación sobre el contenido, como superar un nivel. En este caso, me he sentido perdida pensando que no avanzaba. La progresión es lentísima y en ocasiones parece que no sabían como hacer su juego más largo. Se siente como una demo de 25 horas, con poco contenido variable y demasiadas repeticiones. No digo que el juego deba durar 2 horas, pero si querían alargarlo, existen muchos otros métodos. El sistema de mejora del reino de Camelot no esta nada mal, pero al final toca decidir entre invertir recursos en mejoras del reino o en tu caballero. Lo segundo te permite completar las mazmorras mucho más rápido y ha sido mi prioridad.
Al final, después de realizar este análisis de Knight vs Giant, siento que ha salido como una ampliación de su propia demo. Sin embargo, los desarrolladores se están tomando muy enserio las críticas de la comunidad. En su perfil de Twitter van actualizando sobre los cambios de las próximas actualizaciones. Por mi parte, me gustaría que añadieran mas variedad de minijefes y más fuentes de obtención de recursos. O al menos que este más equilibrado, porque entre invertir en habitantes que no van a aportarme ninguna ventaja y mejorar a mi caballero, la respuesta esta clara. También deberían quitarse el miedo a la progresión: un juego corto no es malo, pero en su caso se vuelve tedioso repetir tantas veces todo. Quizá hoy Knight vs Giant esté algo más flojo, pero quien sabe, en algunos meses puede que sea un juego destacado de su género.
Puedes encontrar este videojuego a 19,99€ en Steam, Nintendo Switch y otras consolas
